martes, 11 de agosto de 2015

Top 10: desventajas de ser celoso


No es algo chistoso, no es algo justificable. Miles de personas en nuestro país viven sometidas por una relación celosa y poseída. Es hora de reflexionar qué tan insana es esta situación.

1- Las historias que te torturan solo existen en tu mente
Lo más loco de ser celoso es que es algo personal. Nadie puede convencerte de lo contrario, nadie puede sacarte de ahí a menos que tú quieras. Te autotorturas, eres una especie de masoquista. Reflexiona qué tan lejos puede llegar esto…

2- Te guste o no: nadie quiere a alguien así cerca
Si a una persona en su sano juicio le haces elegir entre una relación estable y libre de problemas, contra una acompañada de una persona poseída y maniaca ¿cuál crees que elegirá? No te hagas ilusiones falsas. Los celos no son algo atractivo.

3- Vives en un constante desgaste emocional
Quien dijo que la vida es como una montaña rusa, se refería a los altibajos naturales que la cotidianidad nos da. No se refería a lo antinatural que resulta ser un loco emocional y vivir en un constante ataque de celos, arrebatos y faltas de respeto. No te creas perfecto ni incorrompible. Ten humildad.

5- Estás perdiendo mucho tiempo
Valora cada minuto de tu vida, no desperdicies tu tiempo investigando la vida de personas que ni al caso. Deja de estar pegado al Facebook y a todas las redes sociales; muchas veces tergiversan la información. Fluye sin miedos. Aprende a creer.

6- Que estés encima de tu pareja no te garantiza nada
Podrías revisarle el celular todo el día, perseguirlo y tenerla incluso en cautiverio, y si tu pareja te quiere ser infiel lo hará. Eso no depende de ti ni de tus grados de militar gendarme. Aprende a soltar. Analiza si realmente crees en tu pareja o déjala.

7- Cada vez que armas un pleito por celos tu relación se desvanece
Lo más chistoso de la gente celosa es que de verdad creen que sus relaciones enfermizas durarán para siempre. Abre los ojos, nada malo y disfuncional dura para siempre. Tus pleitos desgastan todo lo que bueno que construyas. Sí o sí.

8- No le estás dando la importancia que debes a tu paz interior
Si no tienes calma, no tienes nada. Tus emociones, tus sueños y tu día a día está alterado por tus malas percepciones. Valora tu tranquilidad y vuelve a ella. No tiene caso estar paranoico.

9- Estás tan mal que te tienes que autojustificar
Obviamente tu autoestima está por los suelos como para que te veas involucrado en situaciones tan desgastantes como esta. Tus ataques de celos siempre tienen un pretexto o una explicación. La culpa no recae en ti. Sabes aventar el balón a los brazos del otro. ¡Qué flojera!

10- Perdonaste una infidelidad: es tu problema
Que tus ataques de celos no se vean respaldados por un perdón que tú decidiste conceder. O perdonas desde el fondo de tu corazón o no perdonas. Pero no puedes después de un cuerno vivir obsesionado con la infidelidad. Si lo cachaste con las manos en la masa mejor déjalo ir.


Texto para el periódico MásPorMás. Léanme ahí todos los martes y jueves ;)

No hay comentarios: